Hoy se ha estrenado la serie en Telecinco en horario de tarde. Un formato que hará competencia a la serie de Cuatro, 'Hablan, Kantan, Mienten' y también sigue en una línea iniciada por todas las cadenas de atraer al público juvenil durante la temporada invernal. Es el caso de la serie 18, interpretada por uno de los artistas de la primera edición de Fama. La serie, versa sobre la vida de dos hermanas gemelas que cambian su identidad por azar y se encontrarán con dos situaciones diferentes a sus antiguas vidas: las intrigas de una constructora y los valores de los habitantes de un barrio de clase media.
Telecinco, ha empezado fuerte su temporada de invierno con el estreno de una serie y no sólo eso, sino por el encuentro organizado en Madrid para hermanos gemelos y por la emisión de dos capítulos en el primer día de su lanzamiento. La serie, que es una adaptación de la comedia chilena 'Amores de mercado', incluye aportaciones genuinas que la diferencian del formato original. Su principal objetivo es, claramente, adaptarla a la realidad española con algún que otro matiz diferente.
Las actrices que encarnan a las dos protagonistas son Alejandra Lorente y Sabrina Praga, que darán vida respectivamente a Sara y Rebeca. Ellas son dos hermanas gemelas que fueron enviadas a dos mundos distintos tras ser separadas el día en que nacieron. El conflicto surge cuando dos posturas aparentemente incompatibles se enamoran del mismo hombre, un arquitecto de la constructora Mendoza Irazábal.
Los dos capítulos estrenados esta tarde, han presentado también a los demás protagonistas de la serie. Aparte de las gemelas y de Rafael Cazorla, completan el reparto principal Eduardo Garrido (Raúl Tejón), director financiero de la constructora y de talante frío y calculador, Arturo Mendoza (Carlos Olalla), dueño de la constructora y casado con Lourdes Irázabal (Maiken Beitia).
En el primer episodio, Rebeca Mendoza mantiene una relación amorosa con Rafa, que acaba de pedirle matrimonio. La chica se encuentra en una encrucijada, ya que oficialmente está comprometida con Eduardo. Sara Martínez, por su parte, ha decidido ser actriz y se presenta a un casting para una telenovela con un vestido que ha comprado con el dinero que le ha dado su madre para pagar la hipoteca de la peluquería. En su barrio, conocerá a Rafael Cazorla, al mismo tiempo que Rebeca gana el proyecto para reformar esa misma plaza. El destino es inmintente y las dos chicas acabarán por encontrarse. Tras este curioso encuentro, se produce una animada conversación en la que ambas se dan cuenta no sólo de lo idénticas que son físicamente, sino que también tienen gustos parecidos. Sara conseguirá que Rebeca vea su vida de otra manera.
'Mi gemela es hija única', la crítica
Una comedia que desvela nuevamente, que no hay nada nuevo bajo el sol. Las remodelaciones de las series son siempre un éxito en España, aunque no brilla precisamente por la calidad dramática de los actores o de sus tramas y argumentos. La línea que todos los canales están siguiendo, se está convirtiendo en una auténtica batalla por las audiencias sin importar la calidad de los contenidos. Sólamente importa la cantidad de adeptos a series de este tipo y, naturalmente, todos de la misma edad por lo que al mismo tiempo que se vulnera la supervivencia de la series que no logran regenerar la audiencia, acaban por saturar al público con los mismos contenidos predecibles y monótonos, en cualquier caso. Sólo queda ver cómo acabará esta nueva versión de 'Amores de mercado'.
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